miércoles, enero 14, 2009

Consejos para el 2009

Pocas veces realizo post en base a publicaciones de terceros, pero es que esta vez la Marce nos envía como regalo esta publicación de la Revista YA de El Mercurio, y resulta tan al hueso para cada una que lo traigo a mi cristal para no olvidarlo. A ver si en realidad este año me sirven estos consejos.

Pequeños Consejos para el 2009

Primero: Lo que se piensa o se sueña no está hecho.
Lo que se empieza y aún no se termina, no está realizado... no aún.
Dicen a veces de los chilenos que conjugamos algunos verbos de manera que llevan a interpretaciones falsas. Por ejemplo, si alguien pide un servicio a otro o a una institución, y luego quiere saber el resultado, se le responde: "Esta haciéndose" o "En eso estamos". Ese tiempo verbal no existe si queremos una comunicación clara y una gestión eficiente. Las cosas están hechas o no están hechas, y las consecuencias del sí o el no al responder se pagan.

Esto es muy importante en la vida de pareja, en las relaciones con los hijos, en el trabajo y en la vida social en general. Si queremos relaciones sanas, lo más importante es la consistencia de las respuestas. De lo contrario, volvemos un poco locos a nuestros interlocutores, y si esto se repite en el tiempo, no hay relación sana posible.

En otras palabras, sugiero usar el sí y el no con más frecuencia en 2009.

Segundo: Cuando estamos contentos y felices, no pensemos que es el comienzo de la felicidad. Es la felicidad misma. No dura, se va, atrapémosla. Ya volverá, pero no nos expongamos a mirar atrás y ver por qué creímos que vendría, mas no disfrutamos la que había.

Tercero: No caigamos en la ilusión de que cambiamos, porque hablamos del cambio o de nuestros procesos. El cambio es un camino silencioso, personal, interno. Lo otro es comunicación, compartir caminos, dilucidar experiencias. No es cambio.

Cuarto: Distingamos entre quejarse y compartir lo que sentimos.
Si otro nos hiere, nos hace sufrir, nos agrede o nos falla, podemos hacerlo saber, podemos advertir las consecuencias, pero somos responsables nosotros mismos, no el otro, de hacer las modificaciones para evitar el dolor. Quejarse con otro y convertir la queja en forma de relación es una linda manera de no hacernos responsables de nuestras vidas.

Quinto y último: Exigirse mucho puede ser una manera de no exigirse nada. Cuidado con los grandes proyectos de cambio; son los pequeños pasos y la ternura con nuestra propia humanidad que llevan a los grandes cambios.

Paula Serrano.

1 comentario:

Daniel. Te invito a visitar http://eldeportero.wordpress.com dijo...

Encontré muy buenos los consejos. Creo que se podrían resumir en disfrutar la vida a cada instante.
Saludos